Un avión cisterna de combate, el Boeing KC-135E Stratotanker perteneciente al Grupo de Aviación N° 10 de la IIª Brigada Aérea de la Fuerza Aérea de Chile (FACh), llevó a cabo una operación de reabastecimiento en vuelo (REVO o REA) durante el ejercicio multinacional Cruzex 2024. Esta operación tuvo como objetivo aumentar la autonomía de los aviones de combate Lockheed Martin F-16C/D Fighting Falcon Block 50 del Grupo de Aviación N° 3 de la Iª Brigada Aérea.
Operación REA entre el KC-135 y F-16C Block 50 durante Cruzex 2024. Cortesía de FACh
De acuerdo con la FACh, la primera misión del KC-135 comenzó a las 09:00 horas del miércoles 7 de noviembre, despegando desde la base aérea de Natal. Su tarea consistió en reabastecer en vuelo a cuatro F-16 Block 50 que realizaban operaciones de ataque simulado en colaboración con otras fuerzas aéreas de la coalición.
La maniobra se llevó a cabo aproximadamente a 15 minutos al norte de la base y se extendió por cerca de una hora sobre el Atlántico. “La misión se llevó a cabo sin inconvenientes, cumpliendo el 100% de los objetivos establecidos por nuestra Órden de Tarea Aérea (Air Tasking Order, ATO),” declaró el comandante de la aeronave, el comandante de escuadrilla Juan Silva.
F-16D Block 50 acercándose al boom del KC-135. Cortesía de FACh
En esta misión, el cabo 1° Yordan Jiménez, quien desempeñó un rol crucial para asegurar una transferencia eficiente y segura de combustible entre el avión cisterna y la aeronave receptora, comentó: “Nuestra misión se realizó cumpliendo con los estrictos parámetros de seguridad requeridos para un ejercicio de esta magnitud, trabajando junto a países con altos estándares operativos”. Añadió que el proceso de reabastecimiento de varias aeronaves de combate se llevó a cabo con el máximo profesionalismo, poniendo a prueba las capacidades tácticas de una fuerza aérea bien preparada y entrenada al más alto nivel.
F-16D Block 50 visto desde la estación del boom operator del KC-135. Cortesía de FACh
Durante el ejercicio Cruzex 2024, que concluye hoy, los recursos humanos y aéreos de 16 países llevaron a cabo un entrenamiento multinacional con el fin de mejorar la interoperabilidad entre las fuerzas aéreas participantes, validar tácticas y compartir experiencias en la utilización del Poder Aéreo en misiones planeadas y ejecutadas bajo metodología OTAN. Entre estas actividades, la FACh lideró una operación Comao que involucró cerca de 60 aeronaves.
Alto nivel de alistamiento operativo
El comandante de la agrupación chilena, general de brigada aérea Nelson Pardo, se refirió al alto nivel de competencia demostrada por la Fuerza Aérea de Chile durante las primeras jornadas del ejercicio, resaltando tanto las capacidades aéreas como las tareas de mantenimiento del personal. “Han cumplido con el rol operativo asignado, evidenciando profesionalismo, rigurosidad y estandarización en cada misión”, destacó, haciendo mención a las misiones de la Fase II y la Fase III del ejercicio, donde los escenarios se tornan progresivamente más complejos.
KC-135E Stratotanker en la plataforma de operaciones de la base aérea de Natal. Cortesía de FAB
La FACh participa con cinco aeronaves F-16 Block 50 y un KC-135 que llegaron el 3 de noviembre a Natal para ser parte del ejercicio que reunió a 100 aeronaves y 3.000 efectivos. “Estos son entrenamientos complejos y simulaciones de combate donde la participación de la FACh no solo exhibe sus capacidades operativas, sino el compromiso de sus tripulaciones y equipos de soporte con los estándares internacionales”, señaló el general Pardo.
En el ejercicio, la Fuerza Aérea desempeñó roles duales, actuando tanto como parte de las fuerzas aliadas azules como simulando el rol de fuerzas rojas. Este entrenamiento les ha permitido evidenciar sus capacidades de «swing role», un aspecto relevante para el entrenamiento de sus efectivos y la validación de sus capacidades como oposición.
Planificación efectiva
El general Pardo destacó que un elemento clave para el éxito demostrado de la Fuerza Aérea de Chile en este ejercicio ha sido la ágil y efectiva planificación del despliegue de la delegación institucional en un escenario internacional. “Desplazarnos a un entorno como Cruzex demuestra nuestras capacidades como institución y sistema”, indicó, enfatizando que todo ha sido el resultado de un trabajo a largo plazo. “Desde 2023, la FACh ha estado preparando este ejercicio, integrando el entorno de Cruzex en sus programas de vuelo y simulaciones, además de realizar una cuidadosa planificación de la llegada a Natal,” añadió.
F-16C Block 50 en rodaje en la plataforma de operaciones de la base aérea de Natal. Cortesía de FAB
“El despliegue a Natal demandó una planificación exhaustiva, abarcando rutas seguras y provisión de reabastecimiento en vuelo que permitieron un traslado directo a la base,” agregó. Como resultado, una vez en el lugar, los equipos de la FACh pudieron iniciar su participación de inmediato, cumpliendo con los cronogramas establecidos y trabajando en estrecha coordinación con los demás países participantes.
Estándar regional de excelencia
Así, en el marco de Cruzex 2024, la FACh ha operado de igual a igual junto a aeronaves de alta tecnología como los F-15 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y los Gripen de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), evidenciando la capacidad de Chile para colaborar con naciones de avanzada tecnología. “Participamos en Cruzex con recursos humanos y materiales de alto nivel, y podemos operar al mismo estándar que plataformas avanzadas,” aseguró el general Pardo, resaltando la importancia de la interoperabilidad alcanzada en este ejercicio. “Las tripulaciones han trabajado bajo los estándares de la OTAN, lo que nos permite verificar y validar nuestros propios procesos operativos en conjunto con otras fuerzas. En un contexto de seguridad regional, la presencia de la FACh en Cruzex no solo refuerza sus capacidades, sino que también actúa como un elemento de disuasión, mostrando el profesionalismo y preparación de sus integrantes,” agregó.
F-16D Block 50 de la FACh junto a un A-4 Skyhawk (AF-1B) de la Marinha do Brasil y un AMX A-1AM de la FAB. Cortesía de FAB
El general Pardo concluyó: “Cada miembro de nuestra delegación en Cruzex representa a la FACh y a Chile. Este ejercicio es una demostración de la disciplina, capacidad y compromiso de nuestra institución. La participación en Cruzex 2024 reafirma el papel de la Fuerza Aérea de Chile en la región, subrayando su preparación y adaptabilidad para enfrentar retos en un entorno de defensa cada vez más exigente.”
Con Información de www.infodefensa.com