La ministra de Defensa Nacional, Adriana Delpiano, realizó una visita a la planta industrial Talcahuano de Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar), donde pudo conocer el progreso en la construcción del primer buque multipropósito del proyecto Escotillón IV Fase 1 de la Armada de Chile, que hasta la fecha tiene un 37% de avance.
Durante su gira por las regiones de La Araucanía y del Biobío, la autoridad supervisó el despliegue de las Fuerzas Armadas y las actividades que se llevan a cabo en el contexto del Estado de Excepción Constitucional de Emergencia en la Macrozona Sur.
De acuerdo con la Armada de Chile, la ministra arribó el 28 de marzo a la base naval Talcahuano, donde fue recibida por el comandante en jefe de la Segunda Zona Naval, contraalmirante Arturo Oxley, quien expuso sobre las funciones del personal en esa jurisdicción y detalló el papel de apoyo logístico que cumple la instalación en el ámbito institucional en esa zona del país.
Luego de explorar la histórica reliquia monitor Huáscar y apreciar su colección museológica, Delpiano se dirigió a Asmar Talcahuano para conocer las capacidades operativas y logísticas de la planta industrial en mantenimiento, reparación y, especialmente, en construcción naval, además de informarse sobre el avance del primer buque multipropósito del proyecto Escotillón IV Fase 1.
Con respecto a esta unidad, cuya construcción inició el 25 de mayo de 2023 con la colocación del bloque de la primera unidad en la grada, la ministra enfatizó la importancia estratégica de Asmar, afirmando que su función “es fundamental, y tanto el Ministerio (de Defensa) como el Gobierno comprenden que la Política Nacional de Construcción Naval es una política de Estado que trasciende a los gobiernos de turno».
Proyecto Escotillón IV
La Armada de Chile y Asmar, según lo publicado por Infodefensa.com, firmaron el 31 de agosto de 2022 el contrato para la construcción de dos buques multipropósito del proyecto Escotillón IV Fase 1, por un monto de 409,9 millones de dólares y un plazo de ejecución de 100 meses. Desde esa fecha, se inició el proceso de adquisición de equipos, materiales e insumos necesarios.
La construcción de las dos primeras unidades, que forman parte de un total de cuatro proyectadas y que comenzó simbólicamente el 27 de febrero de 2022 con el corte de una bagra, permitirá a la institución incorporar una nueva generación de buques que modernizarán y miglioran las capacidades de despliegue del Comando Anfibio y de Transportes Navales (Comanfitran), tanto en operaciones militares como humanitarias.
Estos buques tendrán la capacidad de operar a lo largo de todo el Pacífico y podrán navegar en aguas antárticas durante los meses de verano. Sus operaciones incluirán apoyo logístico, misiones de búsqueda y rescate (SAR), el movimiento y despliegue de tropas y material, así como asistencia humanitaria y respuesta a desastres (HADR). Estarán equipados con un hangar y cubierta de vuelo para helicópteros Airbus Cougar, Dauphin oSikorsky Black Hawk, así como aeronaves VTOL.
Las unidades medirán 110 m de eslora, 21,8 m de manga, 13,8 m de puntal, y tendrán un desplazamiento de 7.987 toneladas. Contarán con propulsión diésel-eléctrica, con una potencia de 11.200 kW y una potencia eléctrica de 6.000 kW. Podrán alcanzar una velocidad máxima de 17 nudos y una velocidad económica de 12 nudos, con una autonomía de 30 días y una distancia de 7.000 millas náuticas, así como un potencial de operación de 187 días al año.
La tripulación estará compuesta por 21 oficiales y 74 marineros, y podrá transportar una fuerza integrada por un comandante, un staff de la Fuerza de Tarea Anfibia, un comandante de Batallón de Infantería de Marina (IM), 16 oficiales IM y 231 soldados IM. Además, contarán con una lancha de desembarco de Asenav de 19,78 m de eslora, 5,6 m de manga, 1,1 m de calado y capacidad para 33 toneladas; una cubierta para transporte de material rodante y de contenedores; y una enfermería para apoyo sanitario.